Moscú, Rusia.
- El pasado fin de semana, Rusia vivió uno de sus momentos más tensos pues el Grupo Wagner, un ejército de mercenarios comandados por Yevgueni Prigozhin, había adelantado que tomarían el país tras denunciar ataques a sus bases militares ubicadas en Ucrania, los cuales fueron perpetrados por el Ejército ruso, motivo por el cual se temió por la posibilidad de haber una guerra civil que al final no fue tras haber llegado a un acuerdo que permitió dar la orden a los mercenarios a mostrar retirada.
Pese a lo anterior, el presidente Vladimir Putin había asegurado que los mercenarios pagarían las consecuencias aunque al parecer ya se retracto.Fue este martes 27 de junio cuando las autoridades rusas dijeron que los cargos penales en contra del Grupo Wagner habían quedado oficialmente retirados, todo en el marco en que su líder, quien además es conocido bajo el pseudónimo del 'Chef de Putin' por haber lanzado una importante cadena de restaurantes de alta gama de los cuales el mandatario era cliente, comenzó su viaje a Bielorrusia donde a partir de este momento comenzará su exilio.
El mandatario en tanto, también lanzó una propuesta a los mercenarios para unirse a su ejército y luchar en contra del país gobernado por Volodimir Zelensky.Antes de esta postura, Vladimir Putin dirigió un mensaje en cadena nacional donde se le vio visiblemente enojado, asegurando que los mercenarios serían llevados ante la justicia, po roo que se auguraba que podrían pasar hasta 20 años tras las rejas acusados del delito de organizar un motín armado.
Fue hasta el cuarto discurso público del presidente cuando se prometió que no habría tales medidas en un acto de garantizar la seguridad en el país y evitar alarmar a la población en general.
.Fuente: Tribuna .
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